miércoles, 28 de octubre de 2009

No me apetece

No se si es que con el embarazo me estoy volviendo más sensible, o es que con el paso del tiempo soy un poquito más sabia. Pero últimamente hay cosas que no me apetecen...

... no me apetece tener que ver cuerpos desmembrados por una bomba terrorista en Pakistán, con que me informen de que tal atrocidad ha ocurrido ya es suficiente. Así que retiro la vista o directamente cambio de canal.

... no me apetece tener que llevar unos zapatos elegantes porque sí, cuando lo que me gustan son las zapatillas. Así que destierro los tacones y me pongo mis deportivas.

... no me apetece tener que escuchar consejos que no he pedido, así que directamente corto la conversación y san seacabó. Tampoco me apetece dar consejos si no me los han pedido, y tal vez ni aunque me los pidan, así que dejo de hacerlo.

... no me apetece escuchar tonterías sin sentido. Así que cambio de canal cada vez que ciertos políticos salen por la televisión o por la radio...

(Nunca me ha apetecido escuchar a cierta política en particular, y eso no ha cambiado).

Prefiero leer un buen libro.
O dejarme llevar por mi sentido común, que creo que aún no he perdido.
Sí que me apetece dar cuerda a mi mente, y ser crítica y constructiva.
Mirar por la ventana y admirar mi luz de otoño, aunque este año el cambio climático me esté robando el otoño...
Pasar un ratito en silencio, o no hacer nada.
Sentir a mi alien.
Mantener una buena conversación.
Dar un largo paseo con mis zapatillas, aunque estén viejas y feas; y en buena compañía.
Escribir tonterías, aunque tal vez no lo sean tanto...

domingo, 25 de octubre de 2009

Yo también he visto Reservoir Dogs



Yo también llevo muy mal las frases pseudohippies. Menos mal que no me están diciendo demasiadas, o la Reina Alien acabaría devorando entre babas verdosas y ácido molecular a todo el mundo para alimentar a su pequeño...

La imagen es (c) de Cels Piñol, y pertenece al cómic "Plan BB: Manual para bebés con padres raros". El que quiera leer más como esta, ¡que se lo compre!

lunes, 19 de octubre de 2009

Alien

La barriga crece y crece, y sabes que hay un alien dentro. Un alien pequeñito que no deja de crecer.

Al alien le gusta dar vueltas, moverse, no parar quieto. Tu barriga se parece mucho a la de Kane antes de que su alien decidiera salir. Un bulto. Otro bulto. Una patada (o un manotazo, según la altura). ¡La vuelta entera!
La sensación de que hay algo moviéndose ahí dentro es muy, muy extraña. Y a la vez, tranquilizadora y maravillosa.

Ya queda menos para que el alien decida salir. Sólo espero que no lo haga igual que el de Kane...

viernes, 16 de octubre de 2009

Transparente

desamparar.
(De des- y amparar).
1. tr. Abandonar, dejar sin amparo ni favor a alguien o algo que lo pide o necesita.
2. tr. Ausentarse, abandonar un lugar o sitio.

Necesitas hablar con alguien pero cuando lo intentas, ves que no es posible. A pesar de tener gente que está contigo y te apoya, no puedes evitar sentirte totalmente sola ante el peligro, porque sus soluciones, a pesar de estar cargadas de buenas intenciones, están vacías de contenido y no sirven de nada. Los que sabes que sí pueden ayudarte no lo hacen, te ignoran, no eres más que un mueble o un número o una tarjeta sanitaria para ellos. No puedes preguntar, no puedes cuestionar, no puedes exigirles más atención o respuestas, pues te siguen ignorando por completo. Te conviertes en un ser totalmente transparente y como tal te sientes por dentro.

viernes, 9 de octubre de 2009

Silencio

Llevo un rato leyendo, leyendo un buen libro echada en el sofá de mi casa y en "silencio". En "silencio" significa que no tengo puesta la televisión, ni la radio, y que aparentemente debería estar tranquila y disfrutando de mi lectura.
Pero por aquí, en silencio, significa el autobús que para bajo mi ventana y que arranca con más ruido que el que hace el Enterprise al arrancar. El siguiente autobús que pasa dos minutos después, y que hace el mismo ruido. Las obras que hay enfrente y que llevan abriendo el pavimento a martillazos desde las ocho de la mañana (son las cuatro y veinte de la tarde). La gente que pasa hablando a gritos por el teléfono móvil. El cláxon del coche. La ambulancia de la Cruz Roja probando a ver si funcionan las sirenas. La ambulancia de la Cruz Roja saliendo con las sirenas a todo meter (aunque no haya tráfico). El aire acondicionado del edificio de oficinas de al lado. El zumbido de este ordenador...

Ayer leí una columna que hablaba de lo que se valora el silencio en Japón, y de lo ruidosos que podemos llegar a ser los españoles.

Cuando el cuerpo pide silencio de verdad (ahora), envidio muchísimo a los japoneses...